Martín Aguilar
Dignificar la vida de las personas vulnerables es una de las directrices del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia del Estado de México (DIFEM), como Gonzalo Santa Cruz Arzate, quien recibió una silla de ruedas después de perder una extremidad debido a la diabetes.
Gonzalo es parte de los más de 21 mil mexiquenses en 27 municipios beneficiados a través de las Jornadas DIFEM, un programa impulsado por la hobernadora Delfina Gómez Álvarez. Este esfuerzo tiene como objetivo llevar servicios asistenciales a las comunidades más vulnerables del estado.
A través de las Jornadas DIFEM, se ofrecen consultas médicas, odontológicas, asesorías nutricionales y jurídicas, así como talleres y conferencias de manera gratuita.
Entre los beneficiarios también destaca Joaquín Navarrete Medina, un campesino del municipio de Jiquipilco, fue apoyado con paquetes de semillas de hortalizas, con lo que podrá mejorar su producción agrícola y contribuir al bienestar de su familia.
El programa, que inició en febrero de 2024 bajo la dirección de Karina Labastida Sotelo, directora General del DIFEM, busca acercar estos servicios a las comunidades más alejadas.
Lo anterior permite que los ciudadanos en situación de vulnerabilidad reciban atención directa sin tener que desplazarse a zonas urbanas. Esta estrategia ha sido fundamental para mejorar la calidad de vida de miles de mexiquenses, quienes de otra forma no tendrían acceso a estos servicios.
En las recientes jornadas realizadas en los municipios de Jiquipilco y Jocotitlán, al norte del Estado de México, las autoridades municipales y los servidores públicos del DIFEM trabajaron de la mano para atender a familias que enfrentan situaciones de vulnerabilidad.
Por ello, la directora de Prevención y Bienestar Familiar del DIFEM, Rocío Pérez Andrade, agradeció el apoyo de las autoridades locales por su participación activa en estas jornadas.
Pérez Andrade destacó que este trabajo conjunto es clave para construir comunidades más saludables y seguras, asegurando que el objetivo de no dejar a nadie atrás ni a nadie fuera se cumpla.
El impacto de estas jornadas, dijo, no solo se refleja en la cantidad de beneficiarios, sino también en la diversidad de apoyos entregados, desde atención médica hasta recursos agrícolas, lo que permite que las familias puedan mejorar sus condiciones de vida de manera integral.
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