Fwd: Coordenadas Políticas/Martí Aguilar/Nadie sabe para quien trabaja

Si bien es cierto que Santiago Taboada perdió ante Clara Brugada la disputa por la Jefatura de Gobierno, también lo es que el dos veces alcalde en Benito Juárez acumuló un capital político importante que, incluso, le puede quedar grande al PAN.

 

Por su juventud y nivel de posicionamiento alcanzado, Taboada se vuelve atractivo para la oposición, que fue borrada en las urnas por Morena. El Güero ya no puede ser considerado como uno más en el grupo de Los Cinco Magníficos del blanquiazul.

 

Al perder las elecciones se convierte en el único del clan que no tiene algún cargo político, por lo que puede andar suelto en busca de reposicionarse.

 

Y es que Jorge Romero, cabeza del grupo que domina el PAN, será el nuevo dirigente nacional a partir de octubre. Con él está Andrés Atayde, presidente del blanquiazul en la CDMX, que será su próximo coordinador legislativo en Donceles.

 

Las otras piezas importantes del clan son Mauricio Tabe, alcalde en Miguel Hidalgo, y Luis Mendoza, alcalde electo en Benito Juárez. Ellos tres, junto con Von Roehrich y el propio Taboada, forman el quinteto que se apropió del partido bajo el mando de Romero.

 

Si Santiago no será alcalde ni diputado, y tampoco presidente local del PAN, pues desde antes de las elecciones se decidió que la próxima dirigente será la diputada Luisa Gutiérrez, ¿entonces qué harán con él?

 

Apenas el domingo, Taboada se dejó ver con el grupo que plantea la creación del Frente Cívico Nacional como un partido político que abandere las causas centro-democráticas, con los ciudadanos a la cabeza.

 

Y quizá no sea un mal camino, pues hay políticos valiosos, como Guadalupe Acosta Naranjo, Fernando Belaunzarán o Emilio Álvarez Icaza, entre otros. No suena mal, pero no dejan de ser políticos y nadie creería eso de que sólo son ciudadanos.

 

A lo mejor Santiago debería iniciar un camino fuera de la caja del PAN, buscando atraer a los futuros votantes que no comulgan con los políticos tradicionales, sino con quienes abanderen sus causas.

 

Puede dedicarse a salonear en las universidades, para jalar a los estudiantes a un frente por la ciudad, sin que necesariamente se tengan que pintar de un color o arroparse en una bandera partidista.

 

Construir con ellos el proyecto de ciudad que sueñan y organizarlos en una especie de organización espejo, para verificar las acciones de Brugada y tratar de que sus proyectos puedan ser tomados en cuenta por el nuevo gobierno.

 

Taboada tiene la gran oportunidad de convertirse en el líder que la capital requiere, jugando fuera del PAN.