Martín Aguilar
El triunfo de Morena en la Ciudad de México desató una guerra interna en el grupo parlamentario que controlará el Congreso local.
La tensión crece entre quienes aspiran a la coordinación del grupo mayoritario. Hay al menos tres figuras prominentes en la contienda.
La primera es Martha Ávila, actual líder, quien fue reelegida por el distrito 28 de Iztapalapa. Su principal atributo es su cercanía con la Jefa de Gobierno electa, Clara Brugada, pero no logró los consensos necesarios al interior del grupo parlamentario.
El segundo es Victor Hugo Romo, diputado electo por el distrito 5 local, quien afirma tener una relación cercana con la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, tras su derrota en la reelección como Alcalde de Miguel Hidalgo.
La que parece la carta más fuerte es Pablo Trejo, diputado electo por el distrito 15 de Iztacalco. Trejo es el más experimentado, tanto académicamente como en su conocimiento de las dinámicas internas del Congreso, ya que ha sido Diputado Local, contralor y dos veces tesorero de ese mismo órgano legislativo.
Además, diseñó la parte institucional del Constituyente, tiene habilidades para negociar con la oposición y resultó ser el mejor conciliador.
Podría ser el Caballo Negro, pues se le vio muy cerca de Clara Brugada durante la parte climática de la campaña, sumando plenamente al movimiento, a pesar de que competía por la Alcaldía Iztacalco.
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