Si bien los problemas internos del PRD ocupan más a sus dirigentes y militantes, en los partidos de la alianza opositora ya les empieza a preocupar hasta dónde estirarán la liga Los Chuchos, en su afán por apoderarse del Comité de la Ciudad de México.
En una acción que ya toma tintes hasta machistas, el grupo comandado por Jesús Zambrano ha promovido sesiones "espurias" con consejeros para mover las fichas de la presidencia estatal, específicamente para apoderarse del área de finanzas.
Apenas la semana pasada, el CEN cedió el control de las cuentas a la nueva encargada del área, Adriana Singler, quien tomó el lugar de Alberto Murakawa, cercano a la presidenta Nora Arias.
Ese movimiento, que se mantiene impugnado, dejó a más de 200 trabajadores del partido sin sustento para sus hogares, y aunque ya se comenzó a pagar, en teoría la nueva encargada no puede disponer de los recursos, hasta que se resuelva la impugnación.
Aunque es un asunto serio, ese sería el menor de los problemas para el sol azteca, pues si el tema no se resuelve pronto y se llega a judicializar, la 4T tendría en sus manos una bomba con todos los enjuagues que dirigentes amarillos han hecho durante años con el dinero de las prerrogativas.
Cuando llegó al cargo, Nora heredó a Aurelio Alfredo Reyes García, quien no resistió mucho y, aprovechando el triunfo de la alianza en Tlalpan, se coló como director Jurídico y de Gobierno con la alcaldesa Alfa González.
Como número dos en esa alcaldía, empezó a acumular quejas por el manejo de los recursos y la repartición de contratos. Reyes García fue el mismo que cerró, como sustituto, la administración de Carlos Estrada en Iztacalco.
La auditoría sobre su gestión en el PRD capitalino está lista, y varios jefes amarillos deben estar rezando para que termine el pleito interno, porque si los papeles llegan a manos de Ernestina Godoy, por ejemplo, varios tendrán que declarar ante el MP.
Los líderes de ADN y Foro Sol, las otras dos corrientes del partido, se preguntan si en verdad sus colegas quieren llevar el pleito más lejos. La mayoría se inclina por un mal arreglo, a seguir con un muy buen pleito.
Y es que si sale salpicado el segundo de abordo de Alfa, el escándalo podría incendiar las tierras de Tlalpan, lo que sería miel para los oídos de Claudia Sheinbaum.
Reyes García siempre ha sido propuesto por Zambrano para las áreas de finanzas. Por culpa de Los Chochos, así les empiezan a decir por tanto años en el presupuesto, el partido ¡y la alianza! podrían reventar.
Si toman un camino sin retorno, quienes pueden perder más son los dirigentes nacionales, que ya se ven con jugosos huesos en la alianza opositora. Arias podría quedarse sin nada, ¿pero acaso tiene algo seguro?
Y en una de esas hasta Tlalpan –que es de donde se mantiene ese grupo– peligraría. Le cerraron las puertas a Alfa para intentar la reelección, y en una de esas tendría que buscar una curul, por si las moscas.
El PRD es una bomba de tiempo, y en el PRI y en el PAN ya dudan si hay alguien que la desactive.
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