El comerciante de ropa y calzado Ramón Giovanni "P", de 28 años de edad, fue acribillado de cinco balazos de arma de fuego calibre .380 en los momentos en que comía tacos en compañía de una mujer en un puesto de la Colonia Guadalupe Proletaria en la Alcaldía de Gustavo A. Madero.
Los encargados de las investigaciones presumen que por la forma en que fue cometido el crimen se debe a un ataque directo; sin embargo, serán los avances de las pesquisas los que determinen los motivos por los que fue ultimado.
La mujer que acompañaba al ahora occiso corrió para evitar ser alcanzada por las balas y es buscada por la policía para que declare en torno a los acontecimientos.
Se presume que los fueron dos sujetos armados a bordo de una motocicleta perpetraron la agresión y tras cometer el crimen escaparon, por lo que las investigaciones continúan a fin de localizar y detener a los criminales.
El reloj marcaba las 20:50 horas de la noche del miércoles, cuando varios disparos de arma de fuego interrumpieron el silencio en Calle 13 en su esquina con Calle 28, en la colonia antes referida.
Y es que un hombre de 26 años de edad, de oficio tianguista, fue sorprendido cuando terminaba de comer tacos en un puesto ambulante con razón social, "El morriz", en compañía de una mujer, cuando dos sujetos llegaron en una motocicleta, uno de ellos bajo y sin mediar palabra, disparó en contra del hombre en varias ocasiones, haciendo blanco la balas en la espalda y brazo del comerciante, arrebatándole la vida de forma inmediata.
Vecinos del lugar salieron de sus domicilios para indagar lo ocurrido, encontrando al vendedor de ropa tirado sobre el pavimento entre un charco de sangre, por lo que de inmediato dieron aviso a las autoridades.
Una intensa movilización policiaca y de servicios de emergencia se registró en el lugar tras el ataque, pero paramédicos encargados de la emergencia únicamente constataron la falta de signos vitales por parte del tianguista, quien en vida respondía al nombre Ramón Geovanni "N".
Familiares de la víctima llegaron minutos después de lo ocurrido para reconocer el cadáver quienes permanecieron a un lado de su familiar hasta la llegada de los servicios periciales, quienes tras recolectar al menos 6 casquillos percutidos, fueron los encargados de trasladar el cuerpo sin vida hacia el anfiteatro de la demarcación.
Policías de la Secretaria de Seguridad Ciudadana (SSC) Sector Ticomán montaron un dispositivo para dar con los responsables, sin embargo, no lograron ningún aseguramiento.
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