Rebeca Marín
El poderoso grupo de presión energética Instituto Americano del Petróleo (API, por sus siglas en inglés), insistió en que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) sigue violando acuerdos comerciales entre México y Estados Unidos.
"Desafortunadamente, hemos visto esfuerzos continuos por parte de la administración del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador para socavar ese acuerdo y discriminar a los inversionistas estadounidenses en violación de los compromisos asumidos por México tanto en el TLCAN (Tratado de Libre Comercio de America del Norte) como en el Tratado entre México Estados Unidos y Canadá (TMEC)", acusó Michael J. Sommers, presidente del lobby, en una carta enviada a altos funcionarios del gobierno norteamericano.
API dijo que en junio de 2020 envió una carta al gobierno de Trump para señalar estos problemas, pero el gobierno mexicano incrementó sus acciones en contra de las empresas privadas al reformar dos legislaciones, la Ley de la Industria Eléctrica y la Ley de Hidrocarburos, para privilegia a las compañías estatales Pemex y CFE.
"El denominador común de ambas leyes es obstaculizar la nueva inversión privada en el sector energético, así como destruir el valor de los activos privados que ya están en funcionamiento".
El grupo de cabildeo enlistó que las medidas del gobierno contradicen el tratado en materia de comercio de bienes (Artículo 2.3) inversiones (artículo 14.4) y las ventas y compras de las empresas estatales.
Estas acciones también parecen violar reglas adicionales a inversiones incluido el estándar mínimo de tratamiento que puede resultar en expropiaciones indirectas.
El grupo de presión pidió a Anthony Blinken, Jennifer Granholm, Gina Raimondo y Katherine Tai, secretarios de Estado, Energía, Comercio y embajadora estadounidenses, respectivamente, que exijan al gobierno mexicano de López Obrador que mantengan sus compromisos con el TMEC y traten a los inversionistas y exportadores estadounidenses de manera justa.
Con sede en Washington DC, API aglutina a más de 600 miembros y tiene ingresos por más de 200 millones de dólares (mdd).
"La misión de API es promover la seguridad en toda la industria a nivel mundial e influir en las políticas públicas en apoyo de una industria de petróleo y gas natural estadounidense fuerte y viable", detalla el grupo energético en su página web.
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