Rebeca Marín
Petróleos Mexicanos (Pemex) aplicará una reducción de 40 mil 500 millones de pesos en su presupuesto de inversión para este año ante el impacto financiero por la pandemia de COVID-19, de acuerdo con un documento que la petrolera envió a inversionistas.
"La empresa decidió evaluar y priorizar aquellas inversiones que son de alta rentabilidad", se lee en el documento firmado por Octavio Romero Oropeza, director general la compañía y Alberto Velázquez García, director corporativo de finanzas. La petrolera no detalló qué proyectos se verían interrumpidos con esta baja en sus gastos de capital.
Este recorte forma parte de una serie de medidas financieras equivalentes a 113 mil 40 millones de pesos para mitigar los efectos que tendrán en sus finanzas la baja internacional en los precios del petróleo y los efectos del coronavirus.
En el plan se incluye el apoyo fiscal del Gobierno al reducirle la tasa de utilidad compartida –el impuesto que paga Pemex por cada barril extraído y producido-por 65 mil millones de pesos, mismo que fue adelantado semanas atrás por el presidente López Obrador y cuyo decreto fue publicado el pasado 21 de abril en el Diario Oficial de la Federación.
En 2020, Pemex verá una reducción de siete puntos porcentuales en la tasa de utilidad compartida (DUC), que representa casi el 80 por ciento de la carga fiscal de la empresa.
Además, se suman 7 mil 540 millones de pesos que Pemex estima que provengan de las coberturas petroleras contratadas por el Gobierno federal a finales del año pasado, y las cuales se aplican en caso de que la mezcla mexicana de exportación se cotizara en menos de 49 dólares por barril, tal como ha sucedido en las últimas semanas.
"Queremos enviar el mensaje claro que la empresa continuará con su estrategia de mejora operativa y financiera", afirmó Pemex en el documento.
Hasta ahora, Pemex era una de las pocas petroleras a nivel internacional que no había anunciado un recorte a su capex (presupuesto de inversión).
Las finanzas de la petrolera se verán afectadas por una menor demanda de combustibles y petróleo derivado de la paralización de algunas actividades económicas, así como menores ingresos debido a la baja constante en el precio de la mezcla nacional de exportación, que cerró este lunes en 6.55 dólares por barril.
Aunado a ese escenario, este mes Pemex perdió el grado de inversión, luego de que Fitch recortara su calificación desde 'BB' a 'BB-' y fuera la segunda agencia calificadora en colocar a la firma en la categoría especulativa.
La primera, Moody's, hundió también en abril la calificación de la petrolera, al bajarla en dos escalones, de 'Baa3' a 'Ba2'.
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