Rebeca Marín
Luego de que en diciembre pasado se informó que siete empresas que se acercaron al Servicio de Administración Tributaria (SAT) para corregir su situación fiscal y regresaron poco más de dos millones de pesos por la compra de facturas falsas, ahora la Procuraduría Fiscal de la Federación dialoga con una empresa en la misma situación y con aproximadamente el mismo monto defraudado.
Tras su asistencia a la inauguración de la ampliación del Museo Numismático Nacional, el procurador fiscal, Carlos Romero Aranda, indicó que el diálogo se debe a que la empresa dejó de pagar impuestos en su momento y se acercó a las autoridades para ver de qué manera podría regularizar su situación, pero dado el monto (2 mil millones de pesos), aunque solamente es una compañía "es importante".
Agregó que está por vencerse el plazo de la declaración anual 2019 y ahí se verá quiénes compraron facturas en los montos que establece la ley, por lo que está en reuniones con el SAT para poder empezar a armar los primeros casos para tener las primeras órdenes de aprehensión.
Romero Aranda instó a los contribuyentes a cumplir con sus obligaciones fiscales y a no comprar facturas falsas, y aclaró que quien lo haga "no tiene nada que temer", por lo que no hay persecución fiscal ni cuestiones políticas en medio.
"Sea político, sea no político, tenga el carácter que sea, si incumple con sus obligaciones fiscales, ahí sí que se preocupe, aquí no es persecución política porque simplemente nosotros vemos si cumple o no cumple", concluyó.
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