José Francisco Montaño
El Senado de la República consideró lamentable y excesiva la decisión de las autoridades interinas de Bolivia, de expulsar a la legación diplomática mexicana en aquel país, por defender el derecho de asilo.
En sendos mensajes, los titulares de los órganos de gobierno de este cuerpo legislativo coincidieron en que, expulsar de ese país a la embajadora María Teresa Mercado Pérez, es un exceso diplomático que no abona a la solución de diferencias, sino que enciende aún más los ánimos.
Mientras que, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Héctor Vasconcelos defendió el derecho de asilo consignado en la legislación internacional. Manifestó que México ha sufrido una serie de actos agresivos por parte del gobierno de facto de Bolivia, como represalia por defender el derecho de asilo.
En su oportunidad, la presidenta del Senado, Mónica Fernández Balboa, dijo que fue una lamentable decisión de las autoridades bolivianas que no abona a solución de diferencias, sino que enciende más los ánimos.
Tajante, la legisladora por Tabasco insistió en que México mantendrá inalterable su política de asilo a cualquier perseguido político y, externó su solidaridad con la embajadora Mercado Pérez y la misión diplomática acreditada en el país andino.
A su vez, Ricardo Monreal Ávila lamentó la decisión del gobierno interino de Bolivia de declarar como persona non grata a la embajadora Mercado Pérez y decretar su expulsión del país sudamericano.
Esto -dijo-, significa una mala señal para la convivencia y el respeto al derecho internacional.
El también coordinador del grupo parlamentario de mayoría en el Senado, aseguró que su partido, Morena, respalda a la embajador y hacen votos para que retornen la cordura y el entendimiento bilateral entre los gobiernos de ambas naciones.
"Ante este acto de hostilidad, la mayoría legislativa en el Senado de la República respalda a nuestra representante diplomática en Bolivia. Hacemos votos para que retornen la cordura y el entendimiento bilateral", señaló.
Apenas el viernes anterior, en su calidad de presidente de la Junta de Coordinación Política de este cuerpo legislativo, Monreal Ávila condenó enérgicamente el acoso y hostigamiento que altos funcionarios del gobierno interino de Bolivia emprendieron en contra de la embajada mexicana.
Ese día, recordó que la embajada mexicana es una extensión de la soberanía de nuestro país aunque se encuentre en otro territorio, por lo que "es inadmisible cualquier acción que atente contra la soberanía nacional y exhortamos a Bolivia a que no viole los recintos diplomáticos de nuestro país, y de ningún otro".
Héctor Vasconcelos, por su parte, lamentó la situación que se presenta entre las dos naciones, las cuales han sido históricamente hermanas. Expresó su deseo de que pronto se reconstituya la vida institucional en Bolivia y se reanuden las relaciones amistosas, que han sido "mutuamente productivas".
Hizo un llamado a regresar a la convicción de que lo importante es sostener las buenas relaciones entre los dos países, pues ambos forman parte de una misma tradición cultural y de América Latina. "Eso es lo importante en el mediano y largo plazo", resaltó.
Recordó que esta situación se originó a raíz de la interrupción del orden constitucional en Bolivia, mediante un golpe de Estado, al que calificó de atípico, ya que las autoridades militares no tomaron el poder, pero fue claro para la comunidad internacional que las fuerzas armadas estuvieron detrás del cambio de poderes en esa nación sudamericana.
Ante esto, dijo, México reaccionó apelando a la nobilísima tradición del asilo, práctica que forma parte del repertorio de posibilidades entre los países desde hace milenios. De modo que nuestro país otorgó asilo a Evo Morales y en represalia hemos sufrido una serie de actos agresivos por parte del actual gobierno de facto de Bolivia.
Héctor Vasconcelos dijo que independientemente de los juicios que se puedan tener sobre el desempeño de Evo Morales como presidente de su país, se trata de defender la vigencia del asilo, del derecho internacional y de acuerdos como la Convención de Viena, que rigen las relaciones internacionales.
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