Noviembre 06/19
LÍDERES POLÍTICOS
Jesús Belmont Vázquez
Financiamiento
*Reducir gasto a los partidos
*INE ve bien un 20 por ciento
Congreso de la Unión.- Algunos propietarios de partidos o empresarios de la política –que para el caso es lo mismo- que figuran en el escenario de la partidocracia, son Jorge González, dueño del PVEM; Alberto Anaya, del PT; Elba Esther Gordillo (Redes Sociales Progresistas); Dante Delgado, de Movimiento Ciudadano y bueno, el mismo presidente López con su partido Morena.
Todos estos dueños de partidos políticos reciben del Instituto Nacional Electoral (INE) miles de millones de pesos cada año como prerrogativas.
Solamente en las últimas dos décadas han nacido y desaparecido un total de 17 partidos políticos nacionales, los que absorbieron recursos federales provenientes de los impuestos de todos los mexicanos por un monto de 6.3 mil millones de pesos.
La gran mayoría de los partidos que emergieron en los últimos 20 años han tenido una presencia bastante fugaz en la vida política, pues muchos de ellos ni siquiera lograron participar más allá de un proceso electoral por no haber obtenido el respaldo de la ciudadanía en las votaciones.
Como ejemplo tenemos los partidos Cardenista, Popular Socialista y Demócrata Mexicano, que recibieron recursos en 1997 para los comicios legislativos y que al no recibir el respaldo en las urnas perdieron su registro y desaparecieron de la esfera política.
Otros partidos como Sociedad Nacionalista y Alianza Social, participaron en los comicios a la Presidencia de 2000 y perdieron su registro tras los comicios intermedios de 2003.
El Partido Social Demócrata surgió en 2004 y se mantuvo hasta los comicios intermedios de 2009, a pesar de que en la elección Presidencial de 2006 incluso postuló a la actual senadora por Movimiento Ciudadano, Patricia Mercado Castro como su candidata y obtuvieron 2.7 por ciento de la votación total.
Después surgieron los partidos Morena (julio 2014), Encuentro Social (2014 y lo perdió en 2018) y Humanista (2014), de los cuales este último apenas participó en una elección para desaparecer en 2015, tras los comicios para renovar la Cámara de Diputados.
Hasta 2014, los partidos debían obtener solo dos por ciento del total de la votación; sin embargo, en la reforma electoral de ese año se elevó el nivel mínimo hasta tres por ciento, lo que ocasionó que el año pasado Encuentro Social y Nueva Alianza perdieran su registro.
El año pasado, los partidos recibieron 12 mil 752 millones 451 mil 864 pesos, una cifra récord en la historia de la política mexicana.
Sobre el financiamiento a los partidos políticos, el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello, sostuvo que su reducción tendría que ser paulatina, a fin de no afectar sus estructuras, operación y campañas electorales.
Asimismo, se evitará que busquen recursos en "fuentes que no sean pertinentes", señaló.
"El financiamiento de los partidos políticos tiene una fórmula que implica un crecimiento paulatino, porque hay dos elementos que siempre están destinados, por lo menos, en los tiempos actuales a crecer: el número de electores en el padrón electoral y el costo de Unidad de Medida y Actualización (UMA)", dijo.
Afirmó que el INE "ve con buenos ojos" un eventual ejercicio de racionalización de los recursos que se otorguen a los partidos.
Por lo anterior, dijo, es importante lograr los consensos, "no solamente para alcanzar el requisito de esta modificación constitucional, sino para que las reglas de la competencia electoral involucren a todos los actores políticos".
Córdova Vianello mencionó que existen diversos planteamientos sobre el porcentaje que debe reducirse, consideró que la propuesta de "un 20 por ciento estaría bien, es mucho más racional. Aunque por supuesto el INE no opina en este sentido".
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