Septiembre 08/19
LÍDERES POLÍTICOS
Jesús Belmont Vázquez
Migración
*Donald Trump impone aranceles
*AMLO informa logros migratorios
Congreso de la Unión.- Curiosamente, un día después de que el gobierno de Donald Trump aplicó aranceles del 31 por ciento a las exportaciones mexicanas de acero estructural a los Estados Unidos, el presidente López invitó al canciller Marcelo Ebrard a su conferencia mañanera para que diera números precisos sobre las detenciones de migrantes en nuestra frontera sur.
No se necesita ser analista político para darse cuenta que México le está haciendo el trabajo sucio a Estados Unidos, al fungir como su policía migratoria.
Nunca antes, en la historia reciente de nuestro país, un presidente había demostrado tal nivel de sometimiento ante un mandatario estadounidense como sucede en la actualidad.
Tal parece que Trump hace un chasquido de dedos y AMLO se apresura a dar información sobre las tareas de México en el terreno migratorio.
Y no, no exageramos, solo basta recordar que la amenaza de los aranceles fue la que orilló al gobierno de la Cuarta Transformación a desplegar miles de elementos de la Guardia Nacional en ambas fronteras, así como en las rutas principales de los migrantes.
El muro fronterizo tan cacareado por Donald Trump se encuentra en el río Suchiate en nuestra frontera con Guatemala, acceso principal de los migrantes procedentes de Centroamérica y otras latitudes del orbe que buscan llegar al sueño americano.
Para quedar bien con Trump -y a solicitud del presidente López-, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, informó que entre mayo y agosto disminuyó un 56 por ciento el flujo migratorio hacia Estados Unidos.
Ebrard dejó en claro que tales cifras son el resultado de la estrategia implementada por el gobierno mexicano para atender el fenómeno de la migración. El mensaje fue directo al presidente de EU.
Informó que un total de 25 mil elementos de la Guardia Nacional participan en las acciones de migración y seguridad.
AMLO –vía Marcelo Ebrard- le dijo al presidente Donald Trump que se ha logrado reducir el flujo migratorio.
Más claro, ni el agua. Un día Trump impone aranceles y al otro López Obrador le dice que estamos trabajando en el tema migratorio. Así de simple.
Y bueno, por lo que vemos el presidente López sigue anclado al pasado. Esta vez se remontó al 2017 para denunciar que en octubre de ese año en un vuelo presidencial –obvio, se refiere a un viaje de Peña Nieto- se compraron rastrillos, cepillos, pasta de dientes, gel, cortaúñas y agua de tocador por un costo de un millón 74 mil 670 pesos.
Su retórica repetitiva: "Luego de 36 años de saqueos, abusos, derroche, de usar el presupuesto para beneficio de minorías, hay quienes se aferran al mismo sistema de corrupción y excesos, por lo que de vez en cuando hay que darles su tenga para que aprenda".
El jefe del Ejecutivo adopta actitudes autoritarias, de aquel que tiene todo el derecho de regañar e imponer conductas a los gobernados que ve como sus súbditos.
¿Tiene sentido hablar un día y al otro también de lo que todos ya sabemos?
México enfrenta un nulo crecimiento económico, el desempleo va al alza, la violencia e inseguridad desatadas y el presidente sale a hablar de una factura de más de un millón de pesos por compra de artículos de tocador que se adquirieron hace casi dos años, todo para decir que hay quienes se aferran al sistema de corrupción y excesos y decirles "tenga para que aprenda".
¿Es ese el discurso a la altura de un estadista, de un gobernante de una nación como México?
Porqué nunca dice los miles de millones de dólares y empleos que el país perdió con la cancelación de las Zonas Económicas Especiales, o cuántas familias fueron afectadas con la desaparición del Programa de Estancias Infantiles, las cuales borró de la administración pública simple y sencillamente por tratarse de proyectos de anteriores administraciones.
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