Las protestas de obreros de la maquiladora extranjera de Lexmark en Ciudad Juárez, Chihuahua, provocaron el despido de 88 trabajadores a quienes no se les ha otorgado la liquidación correspondiente.
Las principales demandas de los inconformes se concentran en el respeto a puestos de antigüedad, mejoras salariales y un alto al acoso en contra de trabajadoras.
El principal desacuerdo fue que a un grupo de obreros se les había otorgado un aumento de 114 a 120 pesos de salario, pero finalmente la compañía decidió frenar el pago hasta nuevo aviso.
De acuerdo con Susana Prieto, el gobierno estatal estaría operando en favor de la compañía, pues los directivos de la firma presentaron una denuncia contra 55 empleados que firmaron la solicitud de sindicato en la Junta de Conciliación y Arbitraje.
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