Luego de que el Senado de la República aprobara la reforma energética y anunciara su turno a la Cámara de Diputados, la autoridad legislativa decidió cerrar prácticamente todos los pasos al recinto, para evitar el posible ingreso de manifestantes, en su mayoría, pertenecientes al Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA).
Las entradas a la Cámara en vehículo y a pie, por Sidar y Rovirosa, a un costado del Palacio Federal de Justicia; Eduardo Molina, Emiliano Zapata y Congreso de la Unión, y calles aledañas, prácticamente están bloqueadas por personal de la Policía Federal y de Resguardo de la Cámara.
Desde agosto pasado, dichos accesos fueron cerrados con vallas antimotines de tres metros de altura y decenas de elementos de la Policía Federal, cuando el Congreso avaló la reforma educativa.
Las barreras para acceder libremente a la Cámara permanecen desde ese entonces, pero en esta ocasión, el operativo se reforzó.
El paso está restringido incluso a legisladores, como la perredista Julisa Mejía, que llegó al lugar por el Metro San Lázaro, pero ya no pudo pasar el cerco establecido por la Policía Federal en el puente que cruza la avenida Eduardo Molina.
En el sitio, personal de Resguardo y Seguridad de la Cámara, le informó a la legisladora que no habría posibilidades de pasar hasta nuevo aviso, pues la autoridad parlamentaria se encontraba "negociando".
Al pie del puente, cerca de 100 personas, en actitud tranquila, comenzaron a aglutinarse y lanzar algunas consignas contra la reforma energética. Se trata en su mayoría de adultos mayores y jóvenes que se concentran en el lugar, sin intentar pasar el cerco.
Otro legislador que quiso llegar por el Metro San Lázaro, pero debió hacer transbordo a la estación Candelaria, fue el priísta Kamel Athie, presidente de la Comisión de Agua y Saneamiento.
El coordinador parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y Presidente de la Junta de Coordinación Política, Silvano Aureoles, entró por el paso subterráneo que cruza Congreso de la Unión, y que anteriormente utilizaban los presidentes para llegar a la Cámara y rendir sus respectivos informes de gobierno.
El personal de limpieza rápidamente fue designado para acondicionar el lugar que desde hace años, estaba prácticamente en desuso.
Al personal sindicalizado de la Cámara, apenas esta mañana se le notificó que por el cierre del sitio y la dificultad para ingresar, no se presentaran a laborar y que para este jueves 12 de diciembre, se comunicaran a las oficinas del Sindicato para recibir instrucciones.
Los legisladores esperan recibir en unos minutos más la minuta proveniente del Senado, misma que se aprobó la mañana de este miércoles, tras largas horas de presentación de reservas en la colegisladora.
La asamblea estaba citada a las 12:00 horas; sin embargo, a las 12:15, poco más de 120 de 500 legisladores, habían logrado registrar su asistencia.
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