La mañana de este martes, el diario estadounidense The Washington Post publicó un artículo en el que da a conocer la obsesión del gobierno federal mexicano, específicamente de Felipe Calderón Hinojosa, por capturar al líder del cártel de Sinaloa, Joaquín "el Chapo" Guzmán. A lo largo de un completo reportaje se informa que tres equipos de fuerzas especiales del Ejército mexicano, la Marina y la Policía Federal tienen la misión de ubicar "vivo o muerto" a "el Chapo", uno de los criminales más buscados en América del Norte y que, incluso, ha sido comparado con Al Capone, Butch Cassidy y Osama bin Laden. "Como señal de la intensificación de los esfuerzos, México opera ahora al menos tres unidades de tiempo completo, capaces de capturar o matar, y exclusivamente dedicadas a terminar con el reinado de Guzmán, aseguraron funcionarios con conocimiento directo de los grupos". "Estos equipos de operaciones especiales, cada uno en el Ejército mexicano, la Marina y la Policía Federal, han sido examinados para trabajar junto a la Administración para el Control de Drogas (DEA) de EU, que es quien provee información sobre las posibles ubicaciones de 'El Chapo'". Pero la tarea de cazar a este criminal es casi una misión imposible, afirma el texto, firmado por su corresponsal en México, William Booth, y el reportero Nicholas Miroff, pues "el Chapo" Guzmán sigue operando con normalidad y fortaleciendo su poder en toda la Sierra Madre de México. Uno de los autores dice que, al momento de visitar la plaza de la cabecera municipal de Badiraguato, Sinaloa, para realizar el reportaje, un desconocido se aproximó a él y lo cuestionó sobre sus actividades en el lugar y si era un agente de la DEA (Drug Enforcement Administration). The Washington Post señala que el presidente Calderón se encuentra "desesperado por capturar a su némesis y probarse a él mismo como un comandante en jefe ganador de una lucha impopular que podría costarle a su Partido la Presidencia". "En el quinto año de una terrible guerra en México, que ha agotado las fuerzas armadas, consume la presidencia de Felipe Calderón y ha dejado más de 43 mil muertos por la violencia del narcotráfico, Joaquín "El Chapo" Guzmán, el fundador del cártel de Sinaloa, es el rey suprema", añade. El texto explica que el presidente Felipe Calderón se ha propuesto que "El Chapo" sea derribado antes de que abandone el cargo y se hace un perfil sobre la vida del narcotraficante, a quien un ex funcionario de la DEA ubica en el llamado Triángulo Dorado, conformado por Durango, Sinaloa y Chihuahua. The Washington Post refuerza su hipótesis de que Joaquín Guzmán está en el Triángulo Dorado al hacer referencia a la declaración del arzobispo de la Diócesis de Durango, Héctor González quien, en 2009, dijo que el líder del cártel de Sinaloa vivía cerca de la zona y que todo el mundo lo sabía, excepto las autoridades mexicanas. Sin embargo, debido a que el gobierno federal no ha podido localizar y capturar al líder del cártel de Sinaloa, a pesar de toda la tecnología puesta para este fin, el supuesto de que este hombre está protegido por las autoridades mexicanas cobra validez. "(El gobierno de) Calderón se ha visto afectado por la percepción de muchos mexicanos de que su administración, sobre todo su ejército, se ha ido fácil sobre el cártel de Guzmán, o incluso que le ayuda, al tiempo que va detrás de su gran rival, "Los Zetas", un poder criminal en auge en el país". "Guzmán se ha beneficiado de la agresiva búsqueda de las fuerzas de seguridad mexicanas contra los Zetas, debido a que los limitados recursos no permiten a las fuerzas hacer frente a todos los grupos criminales con la misma intensidad. Aunque las ganancias de Guzmán se cree que derivan principalmente del tráfico de drogas, el modelo de negocio de Los Zetas se basa en gran medida en el secuestro, la trata de personas y la extorsión". Finalmente, el texto menciona que el cártel de Sinaloa ha probado ser menos violento que el grupo de Los Zetas y da cuenta que su caída podría traer una desestabilización. "(Si cae 'El Chapo') Esto sería un zoológico", dijo un agente antidrogas estadounidense anónimo, entrevistado por The Washington Post sobre las consecuencias de una posible desaparición de Joaquín "el Chapo" Guzmán. La mañana de este martes, el diario estadounidense The Washington Post publicó un artículo en el que da a conocer la obsesión del gobierno federal mexicano, específicamente de Felipe Calderón Hinojosa, por capturar al líder del cártel de Sinaloa, Joaquín "el Chapo" Guzmán. A lo largo de un completo reportaje se informa que tres equipos de fuerzas especiales del Ejército mexicano, la Marina y la Policía Federal tienen la misión de ubicar "vivo o muerto" a "el Chapo", uno de los criminales más buscados en América del Norte y que, incluso, ha sido comparado con Al Capone, Butch Cassidy y Osama bin Laden. "Como señal de la intensificación de los esfuerzos, México opera ahora al menos tres unidades de tiempo completo, capaces de capturar o matar, y exclusivamente dedicadas a terminar con el reinado de Guzmán, aseguraron funcionarios con conocimiento directo de los grupos". "Estos equipos de operaciones especiales, cada uno en el Ejército mexicano, la Marina y la Policía Federal, han sido examinados para trabajar junto a la Administración para el Control de Drogas (DEA) de EU, que es quien provee información sobre las posibles ubicaciones de 'El Chapo'". Pero la tarea de cazar a este criminal es casi una misión imposible, afirma el texto, firmado por su corresponsal en México, William Booth, y el reportero Nicholas Miroff, pues "el Chapo" Guzmán sigue operando con normalidad y fortaleciendo su poder en toda la Sierra Madre de México. Uno de los autores dice que, al momento de visitar la plaza de la cabecera municipal de Badiraguato, Sinaloa, para realizar el reportaje, un desconocido se aproximó a él y lo cuestionó sobre sus actividades en el lugar y si era un agente de la DEA (Drug Enforcement Administration). The Washington Post señala que el presidente Calderón se encuentra "desesperado por capturar a su némesis y probarse a él mismo como un comandante en jefe ganador de una lucha impopular que podría costarle a su Partido la Presidencia". "En el quinto año de una terrible guerra en México, que ha agotado las fuerzas armadas, consume la presidencia de Felipe Calderón y ha dejado más de 43 mil muertos por la violencia del narcotráfico, Joaquín "El Chapo" Guzmán, el fundador del cártel de Sinaloa, es el rey suprema", añade. El texto explica que el presidente Felipe Calderón se ha propuesto que "El Chapo" sea derribado antes de que abandone el cargo y se hace un perfil sobre la vida del narcotraficante, a quien un ex funcionario de la DEA ubica en el llamado Triángulo Dorado, conformado por Durango, Sinaloa y Chihuahua. The Washington Post refuerza su hipótesis de que Joaquín Guzmán está en el Triángulo Dorado al hacer referencia a la declaración del arzobispo de la Diócesis de Durango, Héctor González quien, en 2009, dijo que el líder del cártel de Sinaloa vivía cerca de la zona y que todo el mundo lo sabía, excepto las autoridades mexicanas. Sin embargo, debido a que el gobierno federal no ha podido localizar y capturar al líder del cártel de Sinaloa, a pesar de toda la tecnología puesta para este fin, el supuesto de que este hombre está protegido por las autoridades mexicanas cobra validez. "(El gobierno de) Calderón se ha visto afectado por la percepción de muchos mexicanos de que su administración, sobre todo su ejército, se ha ido fácil sobre el cártel de Guzmán, o incluso que le ayuda, al tiempo que va detrás de su gran rival, "Los Zetas", un poder criminal en auge en el país". "Guzmán se ha beneficiado de la agresiva búsqueda de las fuerzas de seguridad mexicanas contra los Zetas, debido a que los limitados recursos no permiten a las fuerzas hacer frente a todos los grupos criminales con la misma intensidad. Aunque las ganancias de Guzmán se cree que derivan principalmente del tráfico de drogas, el modelo de negocio de Los Zetas se basa en gran medida en el secuestro, la trata de personas y la extorsión". Finalmente, el texto menciona que el cártel de Sinaloa ha probado ser menos violento que el grupo de Los Zetas y da cuenta que su caída podría traer una desestabilización. "(Si cae 'El Chapo') Esto sería un zoológico", dijo un agente antidrogas estadounidense anónimo, entrevistado por The Washington Post sobre las consecuencias de una posible desaparición de Joaquín "el Chapo" Guzmán. |
0 Comentarios