Lino Javier Calderón
El presidente Felipe Calderón, se declaró "indignado" por la muerte de dos mexicanos a manos de la patrulla fronteriza en días pasados, uno de ellos un adolescente de 14 años, y exigió al gobierno de Estados Unidos una investigación "profunda, imparcial y objetiva".
Durante el vuelo de Ciudad de México hacia Johannesburgo, para asistir al cotejo de apertura del Mundial Sudáfrica 2010, Calderón dijo estar "consternado" por estos casos y pidió que la investigación oficial concluya "con el esclarecimiento de los hechos y el castigo a los culpables".
El mandatario se refirió al caso de Anastasio Hernández, quien falleció tras recibir "múltiples golpes y descargas eléctricas" por agentes migratorios en la frontera entre las ciudades de Tijuana, México y San Diego, Estados Unidos.
Pero dijo que el segundo caso, el de Adrián Hernández, un menor de edad fallecido en Ciudad Juárez, colindante con El Paso, estado de Texas, "nos agravia especialmente", no sólo por ser un niño, sino porque además "fue ultimado con disparos de arma de fuego en nuestro propio territorio mexicano".
Por su parte, el titular de Gobernación, Fernando Gómez Mont, llamó a la secretaria de Seguridad Interna de Estados Unidos, Janet Napolitano, para advertir que México "hará uso de los instrumentos diplomáticos y legales a su alcance para que se esclarezcan los hechos".
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