WASHINTON, D. C.- El Presidente Felipe Calderón recriminó ante su homólogo norteamericano Barack Obama la instrumentación de la Ley Arizona y le demandó cumplir con el pacto de amistad que hace un año ofreció a los mexicanos.
Asimismo, le pidió dejar atrás las recriminaciones mutuas y empezar un nuevo capítulo de prosperidad común, para mirar al futuro y comenzar una nueva era en la asociación estratégica de ambas naciones, sustentada en la corresponsabilidad.
Sé que compartimos el interés por promover condiciones de vida digna, legal y ordenada para todos los trabajadores migrantes, quienes a pesar de su enorme contribución a la economía, la sociedad y el progreso de Estados Unidos, viven en las sombras y en ocasiones, como en Arizona, con patrones de discriminación, dijo.
En la ceremonia de bienvenida oficial realizada en la Casa Blanca, el mandatario mexicano subrayó que los momentos actuales son de desafíos monumentales y nos plantean la disyuntiva de volver a las recriminaciones inútiles que nos dañaron o de enfrentar y superar juntos estos retos.
Puntualizó que a partir de ello, México y Estdos Unidos deben empezar un nuevo capítulo de prosperidad común.
"Yo estoy seguro de que trabajando con corresponsabilidad, nuestros gobiernos pueden abrir nuevas vías para una América del Norte más segura, más sustentable, más competitiva y más próspera", apuntó el titular del Ejecutivo mexicano.
Sostuvo que esto se puede hacer si sabemos enfrentar y derrotar juntos al crimen organizado transnacional, que es el enemigo común y la mayor amenaza para los pueblos de ambos países.
Podemos hacerlo, agregó, si apoyamos juntos un nuevo modelo de desarrollo económico en armonía con el medio ambiente y si aprovechamos la complementariedad de nuestras economías, el comercio y la integración, para crear más y mejores empleos para americanos y para mexicanos.
El primer mandatario mexicano indicó que llegará la prosperidad si sabemos trabajar conjuntamente para alentar la integración exitosa de las comunidades México-americanas y latinas en este país.
Lo lograremos, manifestó, si sabemos sumar nuestras fortalezas para convertir a América del Norte en la región más competitiva y más próspera del mundo.
"Podemos hacerlo, si seguimos construyendo una frontera más segura y la convertimos en una frontera que una y no divida a nuestros pueblos, en una tierra de oportunidades y progreso", señaló el presidente Felipe Calderón.
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